A pesar de estos cambios en la denominación, la modificación más grande y significativa para la tarifa nocturna tuvo lugar durante la reforma del 2009. El periodo más económico, el tramo de energía valle constaba de 8 horas antes de la reforma pasando a prolongarse a las  14 horas actuales, de las cuales se componen actualmente las tarifas con discriminación horaria DH, con las múltiples ventajas que esto supuso.
Gráfico horario de invierno y norario de verano (DH)

Un claro ejemplo de los beneficios de esta tarifa de discriminación horaria, se pudo observar en aparatos que están conectados las 24 horas del día con funcionalidad stand by, o electrodomésticos de trabajo continuo como los frigoríficos, que pasaron a consumir un 58,33% de la energía en el periodo valle y un 41,67% en el periodo punta, lo que implicó un ahorro en torno al 20% (únicamente en este tipo de aparatos).

Los aparatos que se conectaban exclusivamente en el periodo valle como el agua caliente sanitaria por acumulación y la calefacción mediante acumuladores, aumentaron sus prestaciones y versatilidad al disponer de un periodo de carga mayor, de 14 horas.

Esta tarifa también nos ofrece la oportunidad de adaptar nuestra rutina a este periodo de 14 horas, permitiendo el desplazamiento al periodo valle del uso de electrodomésticos como lavadoras, lavavajillas, plancha, aspiradoras, etc. (los cuales suponen el mayor porcentaje de consumo energético diario, después de la calefacción o la refrigeración en verano).Traduciéndose, todo ello, en un ahorro importante en nuestra factura eléctrica.

El principal inconveniente que se sigue presentando con la tarifa TDH es un ligero incremento sobre el precio en el periodo de energía punta, el cual está más que compensado por el aumento del ahorro en el periodo valle.